Esta tipografía está inspirada en la estructura del edificio que hoy alberga al Museo Universitario del Chopo, diseñada por Bruno Möhring en 1902 al estilo Jugendstil —equiparable al art nouveau francés—, y por el movimiento de represión hacia los jóvenes durante las décadas de los setenta y ochenta en la Ciudad de México.
Este edificio se convirtió en una de las principales sedes para el desarrollo de bandas de rock en los ochenta, luego de una década de estar replegados a la marginalidad por falta de recintos, sobre todo universitarios, tras el controversial Festival de Avándaro y la trágica Matanza del Jueves de Corpus. En 1980 se instaló en la nave central del edificio la primera feria de discos y libros, que a la postre se convertiría en el hoy Tianguis del Chopo, un mercado informal de intercambio de objetos relacionados con la música popular, particularmente el rock y otros géneros de carácter sub y contracultural. En esa época se presentaron grupos con llenos totales como Botellita de Jerez, El Tri, MCC, Kenny y los Eléctricos y Ritmo Peligroso, así como las primeras presentaciones de proyectos como el de Las Insólitas Imágenes de Aurora, hoy Caifanes.
Después, como un parpadear, formé parte del museo, pero en forma de música. Las Insólitas Imágenes de Aurora revoloteaban en un foro donde la libertad de creación era lo más apreciado, lo más valioso, lo único.
–Saúl Hernández, “Santuario” en El Chopo año por año.
Entre 2002 y 2004, el proyecto cultural del Chopo creció al tiempo que el arte contemporáneo fue integrando los avances de la tecnología a los discursos estéticos. Esta circunstancia, sumada a la vocación de innovación y vanguardia del Chopo, hizo evidente la necesidad de modernizar sus instalaciones y adecuar sus espacios a los requerimientos de las diversas manifestaciones artísticas que promueve.